Intentamos solos y nos fue imposible. E inclusive pedimos ayuda, pero ni siquiera así logramos dar con nuestro cometido. Y es que hasta al más memorioso le cuesta recordar una final de tres horas y cuarto en el cemento de Parque Roca. ¿Los protagonistas? Gonzalo Almirón y el gran campeón Marcos Antico, quién venció (7-6 / 6-7 / 10-8) en la llave decisiva del Abierto de Winston Salem en la “8ª” categoría.
El match, celebrado en el court central del complejo, dio cuenta de un trámite sumamente reñido y disputado, aunque fue Antico el encargado de golpear en los momentos clave para levantar el preciado título. Y el 7-6 del set inicial es un claro reflejo de lo mencionado.
Ya en la segunda manga, y a pesar que en nada se modificó el desarrollo del duelo, fue Almirón el responsable de prevalecer por un nuevo 7-6, pero a su favor.
Párrafo aparte para un tercer parcial donde el calorcito se volvió protagonista. Y tanto como el espíritu ganador de un Marcos que finalmente cerró el campeonato por un glorio 10-8- ¡Felicitaciones!
< Por Renso Denda