Así le habló Dios antes del partido: lo inspiró, tuvo una revelación mística que le permitió a Sebastián Ghio salir a la cancha con un delirio peor que el de Matías Alé.
Pero valió la pena: tanta inspiración le dió un 6-3 / 6-1 sobre Agustín Capilla, un durísimo rival que tiene ganas de seguir peleándola.
Sebas jugó el partido de sus sueños y volvió a alegrarse en el Metro de Otoño "8a": sabe que sumar es clave en uno de los torneos más apasionantes del Circuito.
Ghio hoy aplicó su experiencia sobre el joven Capilla, que si bien dejó la vida en cada pelota, no le alcanzó para frenar al Inmaculado Corazón de Ghio.
_> Por Pablo Acosta