En un partido muy hablado y picante, los hermanos Boris y Lucas Rosales volvieron a demostrar porqué son los mejores en dobles.
Bajo el cielo estrellado de la sede Ferrocarril Oeste, los muchachos estuvieron imparables y nada pudo evitar que se llevaran una gran victoria: 6-2 / 6-0 y a otra cosa mariposa.
Si bien la dupla compuesta por Vives-Bergonzi dejaron la vida en cada pelota, no les alcanzó para frenar a la máquina de 1a.
Con este triunfazo, los hermanos arrancan a todo brillo en el primer peldaño del Dobles de Shanghai 1a, y no le temen a lo que viene: les sobra tenis y mucho entendimiento para volver a consagrarse...
> Por Pablo Acosta