La carita de estos dos muchachos denota lo que fue su partido: se emborracharon de puro deporte.
En una tarde ventosa, Guillermo Jastrzebski logró imponerse ante Gabriel Postiglione para comenzar el Abierto de Miami 8a de la mejor manera.
Fue triunfo para "el de apellido difícil": un 6-1 / 7-5 justo y merecido para el gran batallador del día.
Con mucha profundidad en la bola y gran inteligencia para utilizar los espacios, Guille fue el dueño del partido: aunque, ojo, no la tuvo nada fácil, ya que su rival es uno de los jugadores que más ha progresado en los últimos tiempos y por tanto es un muro humano.
En la próxima ronda, Jastre se medirá con Pablo Guasasco, un histórico de la categoría, con quien ya ha perdido en el año pasado (torneo de Roland Garros).
No será nada fácil pero a Guille le sobra tenis y polenta para torcer la historia...
> Por Pablo Acosta