Matías Castaño no estaba por pedirse un cortadito en lo de Ceci, no señores.
El azúcar la pidió (es literal, no es chiste) ya que en cierto momento del partido sintió que le bajaba la presión. Pero, como buen loquito, siguió jugando.
Del otro lado estaba Federico Ruiz, un groso de la 5a, que le iba a presentar una dura batalla en todo momento, y sino miren el resultado: 3-6 / 6-4 / 6-2 para un Castaño que comenzó desdibujado pero con el correr de los minutos fue metiéndose en el partido hasta llevárselo.
Haciendo uso de su magnífico saque y de su gran técnica, Mati gana nuevamente y se asienta en la categoría.
Se metió nomás en los cuartos de final de Miami y no la tendrá nada fácil: Montalbetti o Strianese serán los posibles rivales, en lo que será un partido para disfrutarlo relajado con un buen trago en la mano...
> Por Pablo Acosta