Frase mítica si las hay, hoy se la podemos colgar al gran Fabián Sancho, que demostró que es un grosso.
Mejor dicho, es un agujero negro por donde se pierden los rivales. En la noche de hoy, sumó una nueva víctima a su currículum: el joven Mario Fernandez, quien a pesar de dejar la vida en el court, no llegó a dar el batacazo.
Fue 6-2 / 5-7 / 6-3 para que Sancho arranque con todo en la primera ronda de Roland Garros en la 4a categoría.
Con su slice maldito y su estado físico admirable, Fabi ganó un partido tremendo que le sirve para avanzar hacia la segunda ronda del segundo Grand Slam del año.
> Por Pablo Acosta