Partido repetido, los mismos jugadores, pero el mismo ganador. Mariano Rodriguez Ocon rompió con todos los estándares y volvió a festejar.
Nuevamente ante Mariano Dieguez, con quien ya se había enfrentado en la final de Australia.
Fue 6-1 / 7-5 para dar el primer paso en Halle 3a e ilusionarse con llegar bien lejos: Rodriguez volvió a mostrar lo mejor de su tenis y como siempre, ante un rival muy "pegador", que se destaca por su derecha potente y filosa.
Aprovechando bien los espacios y planteando una técnica inteligente, Mariano fue delineando las bases para un triunfo que no tardaría en llegar.
Un buen comienzo en Halle y ahora a seguir con todo: vienen rivales cada vez más duros, pero si su juego vuelve a ser el de hoy, va a ser un hueso muy duro de roer...
> Por Pablo Acosta