Que partido lindo que nos regaló el tenis. Sobretodo, y más allá del juego en si mismo, por la nobleza, el respeto y la cordialidad de estos dos jugadores.
Hablamos de Carlos Varini y Javier Casale, dos mostros de la 9a categoría que se enfrentaban para definir quien avanzaría a la semifinal de Halle.
Y en este caso, el triunfo estuvo del lado de Charles, quien jugando a un nivel excelente logró llevarse un contundente pero luchado 7-5 / 6-1: victoria celebrada, en gran parte, por lo que costó.
Es sabido que el estado físico de Casale es increíble y que corre como un desgraciado: por eso mismo, cada pelota, cada punto ganado por Varini lo festejó como si fuera el último.
Ahora a no dormirse en los laureles y a pensar en el próximo rival: José Luis Osuna, quien casualmente jugaba en la cancha de al lado...un partido que promete ser de alto vuelo...
> Por Pablo Acosta