A Guille Marquez le costó, pero finalmente se quedó con el título de Acapulco 4a, tras una final picante que terminó en dos sets ante Jose Padula.
Con mediación de umpire inclusive, la final arrancó con ventaja para Jose, que llegó a estar 5-2 arriba. Pero Guille, que suele perder la cabeza facil, se recuperó y ganó cinco games al hilo. Así se fue el 7-5 que terminaría siendo letal en la confianza del rival. El segundo, terminó menos apretado, aunque con algunos piques divididos. Resultado definitivo 7-5/6-2 para Marquez que contó tras el partido que "ya no hay lugar en la repisa para los trofeos".
"A veces no queda otra que jugar a cara de perro", se sinceró, y también reconoció que tuvo que cambiar la estrategia para levantar el juego. "Traté de buscar menos el fondo y apostar más al error rival". Todo vale, cuando se trata de una final.
Por Felipe Lugones