Empieza el veranito y es menester tener ropitas nuevas para hacerle frente a la moda veraniega.
Por eso tanto Claudio Pignatta como Pablo Sardi, su rival, vinieron a Pasco y mientras esperaban su turno para jugar, retiraron sus premios adeudados.
Se llevaron de todo y encima, pudieron jugar uno de los partidos más lindos de la jornada: pero claro, el tenis siempre tiene un solo ganador y en este caso fue Claudio el que se quedó con el poroto.
Fue doble 6-3 para arrancar con todo en París 7a, uno de los últimos torneos del año que Pignatta está dispuesto a quedarse.
Hoy vino con su pibe y le trajo buena suerte...Traélo siempre!
> Por Pablo Acosta