Y no es nada negativo... Previo al partido llegó a Roca a pelotear y empezar a entrenar a su mujer, para tenerla pronto en las canchas de Circuito.
Después, tocó el partido por Viña 6a, donde Dieguito Krenz le ganó al difícil Darío Balbín. Y le ganó 7-5/6-1. Sorpresivo resultado para meterse en la semi.
Chistoso en la previa, decía que su mujer es una ojota. Muchos esperaron que su suerte sea esquiva para darle sentido a este partido y la posterior nota. Pero Krenz metió el batacazo y demostró que es mucho más que una ojota. Es un buen zapato!
Por Felipe Lugones