¿Acaso hay alguien que pueda negarlo? Mis argumentos son más que sólidos: y si no pregúntenle a Enrique Chistik, artífice de una victoria más que merecida en la mediatarde de Pasco.
Lo llamativo de todo esto, es que su rival, Julio Darouiche, tiene 18 años, es todo un pibe, pero Enrique, a su edad, tuvo la claridad necesaria para forjar este 6-2 / 6-3 que lo hace pisar firme en la primera ronda de Río 10a.
"Mucho slice, mucho top y mucha muñeca", fueron la clave según Quique, para ganar este partidazo e ilusionarse de cara a lo que viene.
"El objetivo de este año es agarrar ritmo y confianza en esta categoría, y el año que viene probar suerte en la 9a", decía Chistik al terminar su partido. Un capo.
> Por Pablo Acosta