Respeto oriental ante todo: Jae Sung Oh pronunció estas palabras ni bien terminado su partido.
La razón? Su rival, el interminable Fernando Nardini, le presentó una durísima batalla que culminó dos horas y media más tarde, con ambos jugadores exhaustos y doloridos.
La verdad fue un partidazo: ambos dejaron la vida para ganar en la primera ronda de Australia 4a, pero fue nuestro amigo Sung (quien se argentinizó "Mario") quien pudo irse celebrando.
Dueño de uno de los reveses a una mano más bonitos de todo el circuito, Marito arrancó abajo, pero por suerte pudo darlo vuelta con mucho corazón.
Fue 4-6 / 6-3 / 6-3 y a otra cosa mariposa: parece que este chico va andar bien a lo largo de todo el torneo y se presenta como una de las alternativas para bajar del podio a los mismos de siempre...
> Por Pablo Acosta