Se equivocan los que piensan que le gusta el totin: nos referimos a que, al igual que los vinos, cuanto más pasan los años mejor se ven.
En esta ocasión, con lo justo y con la lengua afuera terminó este viernes el señor Sergio Gharzia, quien luego de batallar exactamente 3 horas, pudo llevarse la tan ansiada victoria.
Y decimos batallar porque eso es lo que fue: una auténtica guerra tenística ante el durísimo Ariel Auvet, un duro de la "6a", dueño de una de las mejores derechas.
Pero Gharzia tiene mucha experiencia en el lomo y luego de caer 1-6 en el primer set, salió a comerse la cancha, aunque tuvo que sufrir con dos tie-breaks consecutivos, para llevarse el doble 7-6 que lo mete de trompa en la siguiente ronda de Halle.
> Por Pablo Acosta