No todas son negativas y, como se sabe, el tenis da revancha. Y esta vez lo comprobó Anibal Adrasman, que venía de capa caída y pudo salir adelante en los octavos de Halle 4a contra Ari Korin.
Un primer set fugaz, donde el tenis de Anibal tuvo pocos cambios, pero aprovechó de un errático Ariel que se lo dejó servido. Ya en el segundo, cuando todo venía encaminado de la misma manera, se complicó y casi lo fuerza a un tie break.
Pero Anibal lo pudo cerrar 6-0/7-5 para sacar adelante una situación en la que hasta pensó "dejar el tenis por un tiempo", después de aquella recordada derrota contra Fernando Flego. Pero ahora ya hay que pensar en los cuartos de final contra Wiszniewski.
Por Felipe Lugones