Esta vez no le resultó nada fácil. Pero Mario Mareco, le cueste lo que le cueste, siempre -o casi- termina ganado. Esta vez, su víctima fue Nicolás Hirsch: 6-4, 5-7 y 6-1, para coronarse en Basilea y obtener su cuarto título de la temporada.
"Estoy muy cerca de terminar cómo número uno". Esa frase marca el principal objetivo de Mareco. Superar a Fernando Bianco, en una lucha codo a codo. Mareco sumó un importante título, pero la máxima cita es el Masters, donde con un buen papel podrá darse el gusto de ser el mejor del año.
El 2010 fue un año frutífero. Pero él no piensa en una categoría más arriba, está cómodo en la tercera. "Si no me sacan, yo me quedo", explicaba Mario. Con ganas de quedarse ahí, en la que le siente muy bien.
>Por Ezequiel Zuk