La final del Torneo Americano en la categoría 7a, disputada en la sede de Buena Vista en San Fernando, tuvo como gran protagonista a Gustavo Marín, quien logró consagrarse campeón tras imponerse por 7-5 a Alberto Giorgi. El encuentro, correspondiente al certamen de Las Vegas, se caracterizó por la tensión constante y la emoción que se mantuvo hasta el último punto.
El desarrollo del partido fue vibrante. Marín tomó la iniciativa en los primeros juegos, pero Giorgi mostró una notable capacidad de lucha, levantando más de cinco match points con coraje y precisión. Esa resistencia convirtió la definición en un espectáculo cargado de dramatismo, donde cada punto podía cambiar el rumbo del resultado.
A pesar de la solidez de su rival, Gustavo mantuvo la calma y supo insistir con su juego, buscando siempre abrir la cancha y sostener su agresividad en los momentos clave. Esa constancia terminó siendo decisiva para cerrar el set y quedarse con el triunfo tras más de una hora de pura intensidad.
El recorrido previo de Marín en la zona ya dejaba entrever su buen presente. En su debut venció con autoridad a José Luis Pierini por 6-1 y luego, en un partido muy ajustado, superó a Carlos Venturini por 7-6. Estos resultados lo fortalecieron y le dieron el impulso necesario para afrontar la final con confianza y determinación.
Con este título, Gustavo Marín se erige como uno de los referentes de la categoría 7a dentro del CircuitoTenis. Su consagración en Las Vegas no solo refleja su capacidad técnica, sino también su temple competitivo, especialmente en un encuentro donde tuvo que sobreponerse a la férrea resistencia de su rival para coronarse campeón.