En la final del Torneo de Washington en la categoría 6a, disputada en el Club El Abierto, Ramiro Alfano logró una victoria consagratoria frente a Diego Casco por 6-3, 3-6 y 12-10. El partido fue de altísimo nivel, con un desarrollo cargado de tensión y puntos de mucha calidad, en el que Alfano puso fin a la notable racha que venía sosteniendo Casco en el circuito.
El primer set mostró a Alfano con un plan de juego claro: un tenis ofensivo, apoyado en golpes profundos y en un slice de revés que constantemente desacomodó a Casco. Esa estrategia le permitió dominar los intercambios y tomar la delantera con un sólido 6-3. Sin embargo, el segundo parcial tuvo un giro importante: Casco se recompuso, ajustó su servicio y logró mayor agresividad para igualar el marcador con un 6-3 propio.
La definición llegó a un super tie-break que quedará en la memoria por la intensidad y la emoción. Allí, Alfano mostró temple en los momentos críticos, incluso cuando Casco intentaba sostener su invicto. Con un juego que alternó ataques profundos y variaciones de ritmo, Alfano se impuso finalmente por 12-10, celebrando un triunfo que tuvo un sabor especial, por haber tenido 3 Matchs Points y recién poder en el 4to cerrar el mismo.
El recorrido de Alfano en el torneo fue impecable: en octavos de final derrotó a Julian Menelle por 6-1/6-2, luego superó en cuartos a Walter Rosenthal con un claro 6-2/6-2 y en semifinales venció a Diego Scarfo en un parejo 6-4/6-4. Cada paso fue consolidando la confianza y mostrando la consistencia de su tenis.
Con este resultado, Alfano no solo se llevó el título de Washington, sino que también dio un golpe sobre la mesa en la categoría. Su capacidad para elaborar un plan táctico preciso, adaptarse a las circunstancias y sostener el nivel en un final tan ajustado lo convierten en uno de los jugadores más destacados de la temporada.