En una batalla extenuante disputada en Ferro, Martín Barone consiguió por fin lo que se le había negado durante mucho tiempo: vencer a Miguel Ferrante. Lo hizo en dos tiebreaks, después de casi tres horas de un duelo frenético, desprolijo por momentos, pero cargado de tensión y adrenalina.
Hasta hoy, Barone había perdido sus tres enfrentamientos ante Ferrante —uno el año pasado y dos en 2025—, así que este triunfo tuvo un sabor especial. No solo se sacó la mufa: lo hizo en su debut en el Masters de la octava categoría, uno de los escenarios más exigentes del calendario.
El partido fue una montaña rusa de emociones. Hubo constantes quiebres de servicio, prácticamente ninguno de los dos pudo afirmarse con el saque y la paridad fue total. El último match point fue eterno, con ambos corriendo todo, defendiendo pelotas imposibles y peleando cada impacto hasta que finalmente llegó el desahogo para Barone.
Con esta victoria, Martín arranca la fase de grupos con un gran envión en una zona muy competitiva que también comparte con Martín Castrillón y Nicolás Martínez.