Lucas Agostino tuvo una brillante participación en la tercera categoría, consagrándose campeón de Roland Garros. Ya ascendido, ganó un partido en primera y en segunda, logró una trabada victoria sobre Diego Costa por 2-6, 6-4 y 7-6.
Los espectador que observaban detenidamente el encuentro pudieron gozar de los palos que se tiraban Costa y Agostino. Tenis de alto vuelo, de mucha garra e intensidad. Durante más de dos horas se pegaron de lo lindo. Agostino pudo llevarse la victoria y el pase a la segunda ronda, pero pudo haber sido para cualquiera, ya que la paridad siempre fue el eje del juego.
Agostino está fino y con mucha confianza, como para seguir logrando victorias en CircuitoTenis.
>Por Ezequiel Zuk