El partido que jugaron esta noche Federico Churukian y Nestor Muntaner es para sacarse el sombrero. Aunque resulta increíble que, tras dos horas y media de juego, y de tenerlo dos veces arriba para liquidarlo, a Nestor se le halla escapado el partido.
Tras el 6-4 del primer parcial, que tras lo sucedido posteriormente perdería relevancia, Nestor tenía el segundo dos a cero arriba con la chance de mantenerse para asegurar la victoria. Pero Churukian se recuperó en una ráfaga y con seis games seguidos igualo las acciones. Ese golpe pareció despertar a Muntaner, que en el tercero alzó la voz de mando y llegó a estar cinco a cero. Pero el partido les tendría guardado un capítulo más a esta historia. En un abrir y cerrar de ojos, con muchísima suerte de su lado cuando la pelota rozaba la red, Churukian remontó el partido y a fuerza de confianza se quedó con siete games seguidos. De no creer.
En el medio del juego, se vio en varias ocasiones a Federico haciendo el gesto (manos separadas con pulgar e indice arqueados) de lo que tenía que tener para que esas pelotas terminen del otro lado de la red. Y eso sobró hoy de su lado, cosa que escaseaba del otro. La realidad es que lo revirtió y ya se metió en los cuartos de final de Monte Carlo, séptima.
Por Felipe Lugones