Guillermo Marquez se cansó de perder en quinta y bajó a tomar aire a sexta. Por suerte le salió bien, porque venció en sets corridos a un complicado Fredy Montes de Oca en Cincinnati 6a.
A pesar del descenso entre comillas, le tocaba un rival respetable que le plantó resistencia y que no le dejó fácil el trámite. Guille se lo llevó 6-4 / 7-6 que le "devuelve la confianza", como él decía tras el triunfo.
El sábado que viene en Pasco, cuando se enfrenten Diego Edi y Federico Lonjedo, Marquez sabrá a quien espera en los octavos de final. Habrá que ver si puede volver al protagonismo de un torneo tras tanto bajón anímico.
> Por Felipe Lugones
