Se sentía como en casa. Diego D'Onofrio se metió en los cuartos de final de Wimbledon 5a tras vencer 7-6 / 6-1 a Juan Beracochea.
Comenzaron palo y palo. Y rápidamente entró en calor el fanático de Racing, que a los pocos minutos de comenzado el juego ya estaba en remerita. "Eso porque no tengo puesta la camiseta de Gimnasia", comentaba en alusión al veedor que rondaba las canchas y recalcaba su locura de jugar tan desabrigado.
Ahora que está agrandado, tras los buenos últimos resultados sumada a una de las pocas alegrías de Racing en los últimos tiempos, Diego no pierde la esperanza de aprovechar el envíon para quedarse con algún título. Pero para eso deberá superar la próxima parada. Un duro enfrentamiento ante Mariano Privitello.
> Por Felipe Lugones