Gustavo Ruiz Lima aplastó a Marcelo Fernandez en los octavos de Montreal 6a y de paso se sacó las ganas de jugar que le habían surgido tras los contratiempos del último fin de semana.
El uruguayo, que encima no pegó una con el desempeño futbolístico de su selección, se quedó con las ganas de disputar Metz en Pinamar debido a un desperfecto en el auto que lo dejó en el camino, a la altura de Chascomus. Y por eso hoy vino a comerse la cancha y se lo llevó 6-2 / 6-0.
Y una vez más, Gustavo se mete en otra zona caliente. Esta vez en los cuartos de Montreal, a donde espera al ganador del cruce entre Lorenzatto y Bengoechea.
> Por Felipe Lugones