A Fernando Andrada se lo vio muy bien en el partido que le toco jugar frente a Guido Spittle, ya que le gano por 6-4 / 6-2 y así avanzo a la segunda ronda del Torneo de Basilea.
El no haber jugado ningún deportes antes de venir a jugar al tenis, (como él suele hacer), le vino bien porque mostro toda su artillería para bloquear a su rival y vencerlo sin atenuantes y contundencia.
La volea y la profundidad que consiguió con sus tiros fue clave en el triunfo de hoy para Fernando, que además no se desespero y siendo paciente cerró el partido sin complicarse demasiado, ahora está en la segunda ronda y es una amenaza para cualquiera…
> Por Sebastián Rodríguez.