Verdadera batalla la que ganó estoicamente Martín Esses esta noche. Fue 6-2 / 2-6 / 6-4 / 0-6 / 6-3 ante el siempre temible Mariano Privitello. De esta forma, Martín toca el cielo con las manos y se corona campeón de Estados Unidos 5a.
Partido reñidísimo como pocos, Martín lo ganó con un físico terco que negaba a ceder a un cansancio demoledor.
Mariano, sin embargo, siempre estuvo a la altura de las circunstancias: nunca le dio un set de respiro y, si el partido hubiera seguido indefinidamente, probablemente hubiera sido así: un set uno, un set otro, un set uno…
Pero la clave para Martín, según sus propias palabras, fue ganar el primer set. Cuerpo y mente, más claro imposible.
Felicitaciones, merecido campeón.
> Por Ezequiel Santos