"Fue una final rara", con esa frase resumía Leonardo González lo que sentía tras haberse consagrado campeón de su primer torneo en este 2013. En la final de París 3a superó por 6-2 / 6-1 a Sergio P. Castañeda.
Leo no presumía a ninguno de los dos en la final, por eso impuso el mote de raro, de impensado. En la semi venció a un rival durísimo, un potente sacador y pegador (Kucharsky) y se encontró con otro histórico en la definición del último torneo que quedó colgado del 2012.
Pero aparte de eso, en la final pasó de todo. Piedritas que impedía el transcurse fino del partido, bichos raros meriodando el polvo de la cancha 2 de Ferro (donde el 2447 es claro local) y un corte de luz -¡solo en esa cancha!- que demoró veinte minutos el cotejo.
Pero a pesar de todos los obstáculos, González hizo lo suyo: aprovechó las chances que tuvo en un primer set parejo y se dedicó a "no errar" para llevarse el segundo, en el que Castañeda desapareció del partido.
"Quizás estaba apurado para irse...", comentaba Leo entre risas...
González comenzó el año con todo y espera dejar atrás un convulsionado 2012 para volver a ser aquel que estaba más para el ascenso que para remarla desde atrás. De a poco vuelve el campeón...
> Por Ezequiel Zuk