La descripción le calza justo a Juampi Oliveros. Es que, como la rojinegra línea de colectivos, llega siempre.
Es increíble tanta agilidad y destreza para llegar absolutamente a las pelotas más complicadas y profundas: en la noche de Pasco, no hubo una sola bocha a la que Oliveros no llegara.
Fue triunfo por doble 6-1 sobre el debutante Yuri Lautenschlager, quien a pesar del abultado score, tuvo un muy buen juego y seguramente con algunos partidos más va a comenzar a establecerse en la categoría.
Triunfazo entonces para Oliveros que pisa firme en todos los frentes: tanto en singles como dobles viene ganando y parece que por suerte su racha no quiere cortarse...
> Por Pablo Acosta