A pesar de los trastornos ocasionados por un corte de luz imprevisto, que obligó a suspender el partido en su mejor momento, Pablo Werner logró llevarse un triunfazo para avanzar hacia los cuartos de final de Roland Garros 6a.
Jugando bien en todo momento y dominando desde el fondo, Pablo supo como doblegar a un Diego Pedreira que llegó diezmado: a pesar de dejar la vida en la cancha, Diego no estuvo a la altura de las circunstancias y cayó en un estrepitoso 6-1 / 6-1 que lo dejó afuera sin concesiones.
Werner hizo valer su chapa y ahora apunta a llegar bien alto en el torneo más importante del Circuito: Rolanga es la obsesión de todos y Pablo Werner quiere colgarse la medalla.
> Por Pablo Acosta